Una nueva envolvente para traer al siglo XXI el Palacio de Justicia de Zagreb
Se levanta en medio de una de las calles principales de la capital croata como un coloso. El Palacio de Justicia de Zagreb (Palača Pradve) en poco o nada se parece a los edificios de concepto abierto que se construyen hoy en día. Más bien semeja un enorme armazón metálico, un caparazón en el que se resguardan día a día docenas de trabajadores del sistema judicial de Croacia.
El edificio se construyó a principios de los 70 bajo la dirección del arquitecto Ninoslav Kučan, que concibió la construcción como una robusta combinación de líneas y ángulos rectos. Este cuenta con siete pisos y sótano repartidos en múltiples salas de audiencias y oficinas que descansan sobre una estructura de columnas revestidas de mármol gris oscuro.
Los materiales utilizados ponen de relieve la simplicidad y pureza de la estructura, así como los principios arquitectónicos del funcionalismo, estilo en el que se basaron las obras de su autor, que creó los primeros planos del palacio en 1961. Su puesta en marcha tuvo tan buena acogida entre los vecinos de la ciudad y las personalidades del mundo de la cultura que en 1970 le concedieron el premio del Salón de Arquitectura de Zagreb.
Sin embargo, medio siglo después los problemas de aislamiento y funcionalidad de la envolvente obligaron al área de Patrimonio del gobierno croata a dar luz verde a un complejo proyecto de remodelación. Para llevar a cabo la renovación, el departamento de Ingeniería de Grandes Desarrollos de Cortizo y Alumont, instalador oficial de la multinacional en el país eslavo, dieron forma a una solución que devolviese la vida a la histórica fachada de la construcción sin trastocar en lo más mínimo su estética y sin interrumpir la actividad en el interior de los juzgados.
Un reto de ingeniería con el sello de Cortizo
Uno de los primeros retos a los que se enfrentó el equipo encargado de la obra fue la necesidad de conservar su apariencia original atendiendo a los requisitos de rendimiento térmico actuales, por eso se propuso una nueva fachada que tomó como base el sistema TP-52. La nueva envolvente, de más de 8500 m², debía contar con adaptaciones específicas que permitiesen la instalación de madera sobre la perfilería interior de la fachada. Bajo esta premisa se diseñó un muro cortina cuya estructura combina montantes y travesaños Equity, utilizados para facilitar la instalación de los listones en la cara interna, con otros de mayor tamaño creados a medida para el proyecto. Debido a las diferencias en el comportamiento de estos materiales ante los cambios térmicos y de humedad, hubo que desarrollar un sistema de acople ad hoc que contrarrestase las variaciones en la dilatación y contracción de la madera y el aluminio. Por otro lado, con el fin de imitar la estética externa pensada por Kučan, se optó por utilizar una combinación de cristal, vidrio armado y piedra fijados a la estructura portante con perfiles presores cubiertos con tapetas cuadradas (de 130 mm de sección vista) y planas (52 mm). Así, la mezcla de líneas verticales y horizontales otorga al edificio la imagen de una cuadrícula de enormes dimensiones, una especie de tablero gigante en el que las fichas son los rayos de sol que se reflejan en los cristales.
Este proyecto de renovación del muro cortina del Palacio de Justicia de Zagreb incluyó un segundo reto: el reemplazo de 1452 aperturas, cuyo rendimiento térmico no cumplía los requisitos establecidos por las normativas actuales, por unas nuevas de altas prestaciones. Con el objetivo de replicar a la perfección las ventanas preexistentes, los ingenieros de Cortizo adaptaron el tamaño de las hojas, de 2,1 metros de alto y 1,2 de ancho, y conservaron el cierre pivotante de eje horizontal. Para ello se llevó a cabo un fresado específico de algunos de los listones del marco, pues uno de los requisitos de la obra era poder limpiar los sistemas en su totalidad desde dentro. Tomando como base la serie COR 70 Industrial de Cortizo, se diseñó una solución a medida con rotura de puente térmico, espumas de alto aislamiento, vidrios triples e intercalarios de ABS con la que se mejoró la eficiencia del edificio. En cuanto a la estética, al igual que en la fachada, las ventanas debían ser por fuera de aluminio y por dentro de madera, por lo que se crearon junquillos especiales con los que poder facilitar el ensamblado de ambos materiales.
La implementación de todas estas mejoras se vio refrendada con un índice de transmitancia por debajo de 1,2 W/m²K, un valor reducido teniendo en cuenta la limitada superficie vidriada de la estructura y la conductividad térmica de materiales como la piedra. Así, las 150 toneladas de aluminio anodizado extruidas por Cortizo para este proyecto sirvieron para dar una segunda vida a la envolvente, cuyas líneas rectas y contundentes seguirán siendo, por muchos años, las venas del corazón judicial de Croacia.
FICHA TÉCNICA
OBRA: Palacio de Justicia de Zagreb (Palaça Pravde)
UBICACIÓN: Zagreb (Croacia)
ARQUITECTO: Ninoslav Kučan
SISTEMAS DE CORTIZO: Adaptaciones de la fachada TP 52 y el sistema de ventanas Cor 70 Industrial
INSTALADOR: Alumont
Ninoslav Kučan
Ninoslav Kučan nació en 1927 en Breza, cerca de Sarajevo (Bosnia y Herzegovina). Tras años mudándose de ciudad en ciudad debido al trabajo de su padre y después de perder a su hermano Mladen en la II Guerra Mundial, se matriculó en una pequeña academia de bellas artes. Más tarde, en 1945, inició sus estudios de arquitectura en la Facultad Técnica de Zagreb (Tehničkom fakultetu u Zagrebu), en la que destacó por su desempeño en las asignaturas de Construcción y Diseño. Sus primeros pasos profesionales los dio en el Instituto Urbano de la República de Croacia (Urbanističkom institutu NR Hrvatske.), donde entró como becario.
En 1954, y tras servir en el ejército, volvió a la universidad, esta vez como integrante del Departamento de Arquitectura de la Facultad Técnica de Zagreb. Alrededor de una década más tarde, en 1967, se fue a trabajar a Alemania, aunque volvió a Croacia en el 69, donde siguió con su carrera profesional. Finalmente, falleció el 22 de agosto de 1994 en la isla de Brač (Croacia).